🦠 El trabajo silencioso de las bacterias probióticas
- LADY VANESSA HUANCHI GUTIERREZ
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¡Hola! Soy Vanessa, y hoy una vez más nos damos un pequeño espacio donde combinamos la ciencia con una buena historia. Hace unos días fue primero de mayo, donde celebramos el Día del Trabajo, una fecha para honrar a quienes con esfuerzo diario sacan adelante a nuestro país. Pero… ¿Alguna vez pensaste que también existen “trabajadores invisibles” que viven dentro de ti y que también merecen reconocimiento?
Sí, estoy hablando de los microorganismos.

🌱 El inicio: cuando descubrí que no todos los microbios eran malos
Durante mis años universitarios, participé en proyectos de biotecnología alimentaria, y fue ahí donde descubrí a los probióticos, estas bacterias buenas que habitan en nuestro sistema digestivo y que juegan un papel clave en nuestra salud diaria. Conocerlos cambió mi manera de ver el mundo invisible: comprendí que no todos los microbios nos hacen daño, muchos más bien nos ayudan. Los probióticos trabajan silenciosamente en nuestros intestinos. Imagínate como buenos vecinos que se encargan de mantener tu “barrio interior” limpio y en orden: ayudan a digerir los alimentos, refuerzan nuestras defensas y evitan que los microbios dañinos se instalen.
🧠 El intestino piensa: el eje intestino-cerebro
Quizás no lo sabías, pero nuestro intestino está tan conectado con el cerebro que los científicos lo llaman “el segundo cerebro”. A esta conexión se le conoce como el eje intestino-cerebro, y los probióticos tienen un rol muy especial en este puente de comunicación.
¿Cómo así? Pues resulta que los microorganismos intestinales producen sustancias que pueden influir en nuestro estado de ánimo, como la serotonina, conocida como la “hormona de la felicidad”. De hecho, más del 90% de la serotonina del cuerpo se produce en el intestino, no en el cerebro.
Por eso, cuando tu digestión va mal, muchas veces también lo hace tu ánimo. Es como cuando tienes desorden en casa: no te concentras, te estresas más rápido y te cuesta sentirte bien. Lo mismo pasa cuando tu microbiota está desequilibrada.

Y si eres de los que lidian con estrés, presión o pesares mentales durante el trabajo (sí, esos días en los que todo parece cuesta arriba), apoyar a tus probióticos puede marcar la diferencia. Una alimentación rica en fibra, fermentados o prebióticos fortalece a estos pequeños aliados, ayudándote a tener una mente más clara, un ánimo más estable y una mejor respuesta al estrés.
Así que sí, cuidar tu alimentación también es cuidar tu bienestar mental.
👩🔬 Este Día del Trabajo… celebremos también lo invisible
En esta semana del Trabajo, te invito a mirar hacia adentro. A valorar a esos pequeños trabajadores que viven dentro de ti, que no descansan, y que hacen posible que digieras, absorbas nutrientes, y hasta te sientas bien emocionalmente. Y también a quienes, como yo, nos dedicamos a estudiarlos y proteger su equilibrio para que tú puedas vivir más sano, más fuerte… y más feliz.
Hasta la próxima gota de conocimiento
Vanessa 💙
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